Si bien hoy en día la educación es indispensable para el progreso de las personas sobre todo en su labor profesional a futuro, claro está, en aquel estudiantado que en verdad quiera y tenga su educación como prioridad para poder labrarse la vida en lo personal, familiar y laboralmente, es necesario entonces que completen de alguna manera, su ciclo educativo hasta titularse como bachiller.
Ser bachiller es la antesala para aspirar ser un profesional universitario. Si no se es bachiller definitivamente no se podrá ingresar a las universidades y optar al título de la profesión que se escoge para desempeñarse como tal toda la vida. Pero también es cierto que, en medio de esas aspiraciones voluntarias de estudiar de los interesados, también es cierto que esas mismas personas necesitan al mismo tiempo trabajar para su manutención o el de su familia directa, o el de su grupo familiar. Es entonces, donde la Validación del Bachillerato se convierte en la opción más viable de los interesados para titularse como bachiller, y al mismo tiempo desempeñarse laboralmente para tener una entrada monetaria que les ayude a llevar el devenir diario.
Esa figura de Validación el Bachillerato se ha ido magnificando cada vez más, sobre todo en estos tiempos de cuarentena sanitaria, por lo que no hay que desaprovechar esa posibilidad de ser bachiller. Con este método de educación se aprende a ser autónomo, ordenado en tiempo y en manifiesto desarrollo, interpretado eso como una formación habitual. Con clases particulares y/o refuerzos escolares les conferirá una noción de provecho de esos modelos educacionales que benefician a toda aquella persona adulta o padres interesados, en el futuro educativo propio o de sus hijos, escenario que sin duda alguna significará la superación individual.
El gobierno nacional e instituciones privadas están dando esa oportunidad de validar el bachillerato. En lo que se refiere a la parte gubernamental, es a través del Instituto Colombiano para el Fomento de la Educación Superior (ICFES) entidad perteneciente al Ministerio de Educación Nacional, con que se evalúa la calidad de los conocimientos académicos que se hayan aprendido. El ICFES es el responsable de realizar una prueba de conocimientos para poder optar al ingreso a las universidades del país. Dicha prueba llamada Saber 11º, o simplemente Examen ICFES, se aplica en los alumnos que están cursando el grado undécimo. De aprobarla, por supuesto accederán a la educación superior. Este tipo de exploración educativa, se conoce muy bien aquí en Colombia, y es más, ha sido tomado por las universidades del país, como patrón o referencia de ingreso.
Es oportuno decir, que este exámen ICFES requiere de una buena base educativa para poder avanzar en el proceso de admisión a la educación universitaria. El alumno que escoja el exámen ICFES para validar su bachillerato, ingresará a las bases de datos propias de esa entidad educativa, por lo que el seguimiento de los resultados obtenidos en los mismos, es tratado muy escolásticamente, es decir, si no se obtiene el puntaje exigido para cada una de las materias que se evalúan, ese aspirante no podrá avanzar al siguiente paso. Definitivamente la prueba ICFES requiere conocer y recordar muy bien cada materia a evaluar, ya que, por su contenido en cuanto a forma y fondo, debe contestarse en un tiempo exacto y puntual, y en número determinado de preguntas. A la final, toda persona que opte a este tipo de evaluación y esté debidamente preparado académicamente, seguro que no tendrá problema alguno en aprobarla.
Ahora bien, validar el bachillerato con instituciones privadas también requiere una disciplina educativa repetitiva e interesada, tan igual o más dedicada que la preparación necesaria para el exámen ICFES. ¿Cuál sería la diferencia? Bueno simplemente que también pueden optar a esta práctica educativa además de los estudiantes que van cursando su undécimo grado en instituciones educativas públicas y privadas, aquellos adultos y menores de edad, que por distintas causas no pudieron finalizar su educación formal en otras instituciones.
Esta opción de validar el bachillerato si se quiere es más práctica, ya que se dan las opciones virtuales, presenciales, semipresenciales, por ciclos y acelerados, dependiendo de la edad y último grado aprobado del o los interesados. De esta manera hay más opciones de escogencias y metodología de estudio para los padres y representantes de los alumnos, que se van por esta manera de educación para sus hijos, bien sea por el tiempo de disponibilidad de ellos para la debida atención y ayuda de sus representados, o por la manera que desean que sus hijos vayan aprendiendo a estudiar, a la par que interactúan con otras actividades familiares, deportivas u otros estudios de actividades extras, destacándose entre estas últimas, aprendizaje de otro idioma y/o estudios musicales. En el caso de los adultos que se inscribieron para validar su bachillerato, es porque pueden cumplir y honrar sus compromisos laborales. Aquellos estudiantes que logren titularse como bachiller bajo esta modalidad de validación, obtendrán su título de bachiller tan igual como el que obtienen los estudiantes que se gradúan en otras instituciones educativas del país.
Es por todo lo expuesto anteriormente que el alumnado en general, los padres y representantes, y demás personas interesadas en validar el bachillerato, podrán escoger la forma en que querrán hacerlo. Lo que sí es importante, es que tanto para el exámen ICFES como para la validación del bachillerato en instituciones dedicadas a ello, el interesado tiene que tener buenos conocimientos académicos, de manera que su rendimiento sea lo más provechoso y rápido posible a su favor, hasta alcanzar el tan ansiado ingreso a las universidades.